Los grandes flamencos: Van Eyck y Van der Weyden

La pintura de Jan van Eyck (hacia 1390-1441) es más elegante y aristocrática que la de Campin; no en balde estuvo al servicio del duque de Borgoña para quien desempañó, además, misiones diplomáticas, llegando en una de ellas a la Península (1429). Su actividad artística se desarrolló en Brujas, capital en práctica del ducado borgoñón.

Jan van Eyck. El matrimonio Arnolfini, 1434, National Gallery, Londres. Es el único retrato doble y de cuerpo entero que conocemos de Van Eyck. El espejo, recurso usual en la pintura flamenca, permite incluir a otros dos personajes, uno de ellos el propio pintor, cuya firma indica que “estuvo allí”, seguramente como testigo de las capitulaciones nupciales del rico banquero italiano establecido en Brujas.

Desde 1432, en que finalizó la compleja obra del políptico de San Bavón de Gante, se conocen numerosas tablas suyas firmadas y datadas en las que se mezclan las de tema religioso -Vírgenes con el Niño y donantes- con los retratos. En las primeras la ambientación es palaciega y lujosa, mientras los segundos suelen ser de carácter burgués por protagonistas, vestimentas y detalles secundarios. De mayor sabiduría pictórica que Campin, no trata la luz y el espacio de manera tan brusca y contrastada sino de forma unitaria, ligando figuras y objetos en una atmósfera real y continua. Van Eyck perfeccionó y generalizó la pintura al óleo usando aceites de linaza y nueces que secaban con rapidez, lo que le permitió aplicar capas superpuestas de pintura logrando efectos de transparencia de gran espectacularidad por su notable realismo.

Jan van Eyck, Virgen del Canciller Rollin, ca. 1435, Museo del Louvre, París. La ambientación es cortesana y rica, como sucede siempre en las obras religiosas del pintor. El donante presenta igual tamaño que las figuras sacras, lo cual es novedad de la pintura flamenca. El tratamiento, muy minucioso y detallado del paisaje del fondo es también característico de esta pintura.

En cuanto a la figura de Roger van der Weyden (1400-1464) habría que señalar que fue discípulo de Campin, trabajando en Bruselas como pintor desde 1435 siguiendo el estilo escultórico de su maestro, aunque matizado por cierta sabiduría y equilibro más propios de van Eyck.

Van der Weyden, Descendimiento, 1435, Museo del Prado, Madrid. Aparecen aquí con claridad las principales novedades del estilo del pintor. De modo particular destaca la elaborada composición, repartiendo tres personajes a cada lado, colocando uno delante y otro detrás de la cruz y compensando toda su verticalidad con las figuras de Cristo y María.

Destacó por su habilidad compositiva: colores, actitudes y sentimientos se orquestan con ritmo equilibrado y fluido. Con él irrumpen en la pintura flamenca los temas más dolorosos de la Pasión en los que presenta una variada gama de expresiones dramáticas; los tipos y escenas por él creados fueron repetidos por pintores de toda Europa que, a través de su lenguaje, no por elaborado menos asequible, asimilaron las innovaciones de Van Eyck y Campin. En el Museo del Prado se guardan tres importantes obras: la Virgen con el Niño y el Descendimiento (1435) son de época temprana, mientras que la pequeña Piedad es posterior a 1450.

Vocabulario
Firma y data: la afirmación personal del artista le lleva a firmar su obra y a datarla, esto es, a recoger la fecha de realización o terminación de la misma.
Óleo: técnica pictórica consistente en disolver los colores en una sustancia oleosa (aceites).
Políptico: pintura, grabado o relieve distribuidos en más de tres hojas.

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